El Parlamento de Australia se reunió para su sesión de primavera el lunes en anticipación a un asunto polémico que se debatirá en las próximas semanas por la legislatura: una propuesta de prohibición de publicidad de apuestas. Cabe resaltar que las tasas de juego problemático continúan siendo altas, consideradas inaceptables por expertos en salud mental y muchos del público, por tanto, funcionarios del gobierno de ambos lados del banquillo han sugerido limitar o prohibir los anuncios que promueven la gran industria del juego del país.
Se espera que el gobierno del Partido Laborista del Primer Ministro Anthony Albanese impulse un límite a la publicidad televisiva relacionada con las apuestas, mientras que los partidos del crossbench están haciendo campaña por una prohibición total.
En base a la propuesta del Laborista, se prohibiría en línea y en televisión durante la programación infantil. Además de limitar los anuncios a ser transmitidos fuera de las transmisiones deportivas en vivo, y una hora antes y después del inicio y final del juego. A las empresas de apuestas se les seguiría permitiendo patrocinar camisetas, además, la señalización en el campo y en el estadio permanecería.
El gobierno de Albanese favorece las restricciones a la publicidad de apuestas en lugar de una prohibición total, que es respaldada por los Verdes. “Reconociendo que este es un tema complejo, estamos adoptando un enfoque integral”, dijo Albanese. El Partido Laborista controla 78 de los 151 escaños en la Cámara y 25 de los 76 escaños en el Senado.
Australia es conocida por tener algunas de las mayores pérdidas de juego anuales per cápita en el mundo.
El Instituto Australiano de Salud y Bienestar dice que casi cuatro de cada diez australianos apuestan al menos semanalmente, con casi el 50% de los hombres informando que juegan cada semana. Los medios populares para apostar incluyen apuestas deportivas, carreras de caballos, juegos de lotería y pokies, o máquinas tragamonedas, en línea y en bares y clubes. Los australianos pierden alrededor de AU$30 mil millones (US$20 mil millones) al año en apuestas.
El Partido Verde cuenta con el apoyo de la Alianza para la Reforma del Juego, que escribió al Parlamento antes de su convocatoria de primavera instando al gobierno a prohibir todos los anuncios de apuestas. La alianza es un comité independiente, sin fines de lucro, que busca reducir los daños del juego. La carta pide que el gobierno y la oposición “se comprometan públicamente a la adopción e implementación rápidas” de todas las recomendaciones hechas en el Informe Murphy 2023. El informe, liderado por la fallecida diputada laborista Peta Murphy, quien murió de cáncer de mama en diciembre de 2023, recomendó una prohibición total de los anuncios de apuestas.
La carta de la alianza está firmada por 74 legisladores actuales o anteriores junto con expertos en salud. Entre los firmantes se encuentran los ex primeros ministros John Howard y Malcolm Turnbull.
En 2023, el Instituto Australiano de Estudios de la Familia encargó una encuesta para medir cómo se siente el público acerca de que los anuncios de apuestas sigan abarrotando los cortes comerciales de televisión.
La mayoría de los 1,765 adultos encuestados dijeron que «ver o escuchar publicidad sobre apuestas» influía en su participación en las apuestas.
La mayoría también razonó que dicho marketing pone a los jóvenes en un riesgo elevado de sufrir daños por el juego. La investigación concluye que los australianos «principalmente apoyan» mayores restricciones a la publicidad de apuestas..